La hipótesis del tiempo fantasma
La Hipótesis del Tiempo Fantasma: ¿Los Años Perdidos de la Historia?
¿Existió la Edad Media? Una Teoría Histórica Cuestionada
Los historiadores alemanes Herbert Illig y Hans-Ulrich Niemitz plantean una interesante hipótesis que desafía nuestra comprensión tradicional de la historia: ¿Y si la Edad Media nunca hubiera existido? Según su teoría, los años comprendidos entre el 614 y el 917 d.C. no ocurrieron en realidad, sino que son producto de una interpretación histórica equivocada, atribuida posteriormente.
El Dilema del Calendario y la Modificación del Tiempo
A lo largo de la historia, cada civilización ha desarrollado su propio calendario basado en las fases lunares y las estaciones de cosecha. Sin embargo, el calendario juliano, instaurado por Julio César en el año 48 a.C., trajo consigo un problema. Aunque estableció que cada cuatro años se añadiera un día adicional para compensar el año solar, se descubrió que el año solar dura 365,24219 días en lugar de los 365,25 días considerados anteriormente. Esto implicaba que se acumulaban 11 minutos adicionales cada año, y cada 128 años se recuperaba un día completo. En 1582, el Papa Gregorio XIII introdujo ajustes al calendario juliano para adaptarlo y corregir este desfase.
El Misterio del Tiempo Fantasma: La Ausencia de Pruebas
En 1995, Herbert Illig y Hans-Ulrich Niemitz argumentaron que la falta de suficientes restos arqueológicos y la dependencia excesiva de fuentes escritas posteriores dificultan la verificación de eventos históricos en los años establecidos. Según ellos, vivimos en realidad en el año 1724, y los años “perdidos” se deben a interpretaciones erróneas, cambios en los calendarios y errores de cálculo a lo largo de los siglos.
Para respaldar su teoría, citan ejemplos como la Capilla Aquisgrán, supuestamente construida en el año 800 d.C., pero ellos sostienen que su construcción tuvo lugar 200 años antes debido a la falta de registros previos sobre la técnica de arco utilizada. Además, argumentan que la existencia de estructuras similares fechadas en el año 1049 es evidencia de la inexistencia de los años en cuestión.
Hans-Ulrich Niemitz afirma que esos años fueron eliminados deliberadamente por una alianza entre el emperador Otto III, Silvestre II y el Papa de la época. Su intención era presenciar el cambio de milenio, aunque faltaran 300 años para ello, y también buscaban adaptar la comprensión del milenarismo cristiano. Niemitz sostiene firmemente que Otto III inventó a Carlomagno y se aseguró de que pareciera un héroe ejemplar.
La falta de documentación sobre la expansión del islam en Persia y Europa, así como la aparente inactividad del pueblo judío durante un período histórico tumultuoso, se convierte en una evidencia importante según Niemitz. Él cree firmemente que si se revisa detenidamente toda esta documentación, se evidenciará la inexistencia de estos años en diversas civilizaciones.
Entonces, ¿en qué año vivimos realmente? ¿En el 2021 o en el 1724? El debate sobre el tiempo fantasma sigue abierto y despierta la curiosidad de historiadores y expertos en todo el mundo.
Redacción NDM