¿Sangre light?
¿Sangre light?
El vampiro se estaba mirando desnudo al espejo, siempre olvidaba que los vampiros no se reflejan en los espejos, ¡Mierda!
Últimamente estaba preocupado por su línea, palpo disgustado sus michelines, acaricio su prominente barriga y su aullido desesperado cruzo la noche. Inmortal y gordo. Últimamente la sangre le engordaba. En sus cuatrocientos años, siempre había mantenido una figura excelente.
Claro que hacia mucho tiempo que ni Blade, ni Van Helsing lo perseguían o sea que hacia poco ejercicio. Se pasaba días tumbado en el ataúd viendo reposiciones en el canal de cine de terror. Decidió que a partir de aquella noche, solo chuparía sangre de personas flacas o anoréxicas, no fuera que la gordura se contagiara, inclusive ataco a varias modelos en un pase de moda. Ningún resultado.
Desesperado, decidió pasarse al zumo de tomate como sustitutivo a la sangre, pero rápidamente cayo en el Bloody Mary, con lo que aparte de no adelgazar, cayo borracho varias varias veces por las escaleras del castillo. Consultando en Google, descubrió varias dietas, vegetarianas, veganas, etc.
Durante varios meses fue el terror de las tiendas dietéticas y nutricionistas. El resultado fue aun peor, aquella sangre le produjo fuertes diarreas, por lo que tuvo que colocar el ataúd junto al baño del sótano perdiendo la conexión al canal de pago.
Finalmente tuvo que recurrir a la ultima solución. Visitar al Gran Maestro, el viaje le costo mucho tiempo y esfuerzo, ya que la transformación nocturna en murciélago, dado su peso, le costo noches y sudores para llegar a la Gran Cueva, su transformación le produjo tales agujetas en los brazos/alas que antes de presentarse al Diablo tuvo que forrarse a Paracetamol.
El Diablo estaba en su sala de Spa con cuatro masajistas tahilandesas, como “Él”, tiene tantos nombres le espeto:
¡Ey Lucifer, como va…!De puta madre chaval-¿Qué passa?-.-Bue…mira que después de cuatrocientos años, estoy como una foca-.-Bueee, cosas del contrato-.Yo, que había echo un curso de abogacía en 1815,le espete- Oye, que lo mío, no es lo de Dorian Grey-.- Mira nene,da lo mismo da, Dorian, que vampiros, licántropos, X-Men o toda esa mierda, es un contrato standard -.Dirigiéndose a una de las vampiras tailandesas le dijo – Na ma hi chann sayya thark-que traducido al tahi libre venia a decir: Tráeme el contrato, nena.
Tras consultar unas quinientas paginas, me dijo: Articulo 2520 apartado B, párrafo 12,el abajo firmante al cumplir 400 tacos podrá ser transformado en lagartija, cerdo, rata de cloaca o variaciones físicas similares, y te advierto que mi bufete de abogados es el mismo de Leeman Brothers y de allí aun saque pasta después de la crisis y te advierto que sino, el calor del infierno es peor que el del metro en hora punta.
Ante tal razonamiento jurídico replegué mi capa y saludando a la concurrencia, salí volando. Me largue zumbando a la tienda Hugo Boss de Aalborg en Dinamarca, donde la noche dura seis meses en invierno, allí compre dos smokings y dos capas tres tallas mas grandes y para casa. Para que luego digan que la vida inmortal de un vampiro es fácil y la dieta del bikini es para todos.
Tom Roca