Los tesoros de la noche de San Juan

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Los tesoros de la noche de San Juan

En la noche de San Juan no solo encontramos leyendas de apariciones, demonios y encantamientos, también encontramos múltiples historias que nos hablan de tesoros escondidos. En España las más comunes son las que hablan de tesoros  olvidados durante la ocupación árabe. En latinoamérica son los españoles los antiguos propietarios de dichos tesoros. Estos tesoros guardan una cosa en común, solo son visibles en esta noche mágica. Da igual de donde seas, si eres de los que estás pensando ir en busca de alguno de estos tesoros, aquí te dejo algunas cosas que quizás deberías saber.

Busca un lugar sobre el que hayas oído alguna leyenda, campo, montaña, castillo, monasterio o mansión, si no conoces ninguna historia cerca de tu localidad, déjate llevar por tu intuición, quien sabe. El momento cumbre es al llegar la medianoche, es aquí cuando tenemos que estar más atentos, porqué previsiblemente será  cuando se nos señale el lugar donde está escondido el tesoro.

Lo más normal es que viéramos una llama o una luminiscencia, esto también sería lo mejor, ya que nos indicaría el lugar exacto. Dicen que si la llama o la luz es roja, encontraremos oro, y si es blanca, encontraremos plata. Pero esta no es la única señal.

Otras veces la cercanía del tesoro nos la indican aquellos que lo guardan, y que gracias a la magia de la noche de San Juan se hacen visibles, o por el contrario pudiera ser que solo pudiéramos oírlos. Bellas damas que lloran por amores incomprendidos, criados que sirven a señores de otras épocas, seres que parecen haber salido de la mitología o de la tradición popular serían los primeros. Arrastrar de cadenas, chirriar de puestas, golpes de martillo, voces de ultratumba o el trote de un caballo, son los que estarían encuadrados en el segundo grupo.

Rituales caseros para la noche de San Juan

Cuando ya tengas más o menos clara la ubicación del tesoro, a partir de ese momento tienes que apagar la  linterna o cualquier luz artificial que lleves contigo, solo podrás encontrarlo a la luz de una vela. No pidas ayuda a Dios, ni a la Virgen, ni la intersección de los santos, y despójate de cualquier objeto religioso que lleves.

Pues dicen que eso podría provocar que el tesoro o bien desapareciera, o cambiara de lugar.  Hay quien dice que también es conveniente colocarse la ropa al revés, y que para los que no se atrevan a ir solos, el número de buscadores siempre tiene que ser impar.

Compórtate con naturalidad, ante los espectros femeninos ve con cuidado, suelen ser hermosas damas que querrán embaucarte, corres el riesgo de quedar encantado, ante monstruos y demonios, intenta mantenerte tranquilo, ya que dicen que no te atacarán si no pueden oler tu miedo. Y sobre todo mantente siempre humilde, pues has de saber que muchos valientes antes que tú, tuvieron serios problemas a causa de su ambición.

Por último, si el tesoro está en una cueva, en una habitación o en un cofre, cuidado al entrar o abrir, pues las monedas y joyas enterradas durante siglos emanan un gas venenoso que te podría matar. Si esto te ocurre por accidente, busca con urgencia un gato o perro negro, animal que lamentablemente habrás de sacrificar y enterrar en el lugar, de lo contrario, morirás antes de una año.

Si finalmente eres de los que tras leer este articulo, decides salir esta noche en busca de un tesoro. Solo te quiero decir, que si lo encuentras, compartas conmigo, al menos tu experiencia.

Fran González

Rituales mágicos para la noche de San Juan.

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