El poder de los cristales: La sangre de Isis

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El poder de los cristales: La sangre de Isis

La Sangre de Isis es una cornalina rara y cara de color rojo. Tiene un aspecto de cristal transparente con efecto como si tuviera humo por dentro. Su origen se encuentra en el Mar Rojo, en Egipto. La piedra toma el nombre de la diosa Isis, que era el arquetipo de la esposa y la madre devota, pero que además era una poderosa sacerdotisa que disponía de poder sobre la vida y la muerte. Antiguamente una vez al año se representaba en los templos un misterio en su honor: el del nacimiento, la muerte y la regeneración .Su uso fue muy popular como amuleto no solo en Egipto (recordemos que la cornalina es un cristal que fue utilizado como amuleto para acompañar a los muertos en el mas allá) sino que se utilizó en Europa, Japón y en Myanmar.

Se cree que era una de las piedras básicas que se describen en el Éxodo sobre el peto que utilizaba el sumo sacerdote y del que Flavio Josefo, historiador romano contemporáneo de Jesús, nos deja una descripción completa y su uso como oráculo.

Otra referencia a esta piedra la hizo Alfonso X el Sabio, que la llamaba “piedra del sueño”. Se decía que tiene un efecto hipnótico, por lo que se utilizaba para aliviar el dolor y para adormecer si había que hacer alguna intervención quirúrgica. Otra de las cosas que comenta sobre este cristal es su capacidad de emitir luz.

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Si meditamos o dormimos con esta piedra automáticamente conectamos con nuestra diosa interna, con lo femenino universal de cada uno de nosotros. Nos ayuda a destapar los velos de Isis y a revelar nuestra intuición y alcanzar la claridad espiritual. Retirar los velos de Isis representa abrir los misterios ocultos, la revelación de la verdad, el conocimiento y la luz.
A nivel espiritual la piedra sangre de Isis ayuda a unir las partes femeninas y masculinas, y te vuelve a poner en contacto con tu parte creativa.

Echar la vista atrás

En el antiguo Egipto, además de como amuleto, esta piedra se utilizaba para neutralizar las emociones negativas. Sirve contra los celos o la envidia, fomentando el perdón. También sirve para trabajar el sentimiento de pena y fomenta la aceptación de los ciclos de la vida. Recordemos que Isis era hermana y esposa de Osiris, el cual fue asesinado por Seth, y al que ella misma consiguió revivir con su magia, engendrando a su hijo Horus.

Para las mujeres es una piedra importante que puede acompañarte si, llegado el momento de la menopausia, tienes sensación de “perdida”. También cuando los hijos se van de casa, tienes el “síndrome de nido vacío”, conectándote con la mujer sabia que ahora debes sacar a la luz. La Sangre de Isis ayuda a reconocer a la diosa antigua y a conectar con tu sabiduría.
El cristal sangre de Isis es una piedra que vigoriza tanto cuerpo como mente, así que es muy útil para aquellas personas perezosas.

En Astrología corresponde a los signos de Aries, Leo, Virgo y Capricornio.

Silvia Rossi

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