Drama de los albinos en África
Drama de los albinos en África
Sara Kemuntont, de 23 años, fue condenada a “cuatro” años por asesinar a su bebé, Esther, de tan solo cuatro meses. Tras admitir los hechos, Sara alegó en su defensa que mató a su hija porque el padre no la aceptaba, la niña era albina, y eso es un signo de mal presagio y una desgracia para la familia. Os contamos el drama de los albinos en África
En gran parte de África, principalmente en Burundi y Tanzania.
Los albinos son perseguidos, asesinados y descuartizados. Sus “trozos” son utilizados como talismanes, en la búsqueda de minas y yacimientos de esmeraldas y diamantes.
Furtivos
Los albinos, son a menudo cazados por furtivos profesionales. Cuyo salario suele oscilar entre una o dos vacas por pieza.
Imagínate por un momento que naciste con una anomalía en tu piel que convierte al Sol en tu peor enemigo, imagínate que además vives en una zona donde además a menudo resulta complicado poder ocultar del astro rey.
Imagínate quedado los escasos recursos sanitarios del lugar donde habitas hace que tu esperanza de vida se reduzca considerablemente, y a esto súmale que la superstición te ha convertido en una maldición para tu familia y un preciado trofeo de caza para todos los demás, no sé tú, pero a mí me da miedo tan solo imaginarlo.
Historia
A lo largo de la historia, aquellos a los que la sociedad ha considerado diferentes no lo han tenido nada fácil, los niños que nacían con una malformación física o con problemas mentales eran considerados castigo divino, y a menudo eran abandonados, recluidos, maltratados y humillados por sus propias familias.
Hasta no hace mucho tiempo las espaldas de los jorobados eran codiciadas para frotar décimos de lotería ya que se consideraba daba buena suerte, y las personas que sufrían enanismo habían dejado de ser bufones de la corte para convertirse en payasos de feria.
La situación de los albinos en África, una situación escalofriante, es, a pesar de todo, tan solo uno de los muchos males que sufre esta sociedad nuestra cada día más enferma. Una sociedad más propia del siglo XIV que del siglo XXI, una sociedad llena de prejuicios y supercherías, una sociedad gobernada por el poder de unos pocos y habitada por una multitud de ciegos conformistas.
Mensajes y más mensajes
Frecuentemente escuchamos mensajes de “Ayuda a África”. Mensajes que en su mayoría solicitan ayuda económica. El dinero es necesario, por supuesto. Pero lo que realmente urge es la necesidad de educar a África, educar al mundo. Una persona es descuartizada por ser albino para vender su cuerpo a trozos como talismanes.
Un hombre es crucificado, por practicar el cristianismo. Una mujer es repudiada de su entorno, por bruja. Mientras otra es condenada a cincuenta latigazos, por salir de casa sin el permiso de su marido. Una más es apedreada hasta la muerte, por haber cometido el delito de adulterio.
Y mientras tanto, miles de personas desposeídas de sus pertenencias, a causa de la barbarie de la guerra. Vagan por el mundo llevando como único equipaje un fardo de sueños rotos.
“Bienvenidos al siglo XXI”
“Cuando perdemos el derecho a ser diferentes, perdemos el privilegio de ser libres.”