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Los amuletos

Desde qué el hombre existe utiliza todo tipo de amuletos, sean piedras, hierbas u objetos dotados de un simbolismo específico, para atraer la suerte, satisfacer deseos personales, protegerse de múltiples peligros físicos o espirituales, o como efecto de curación para el cuerpo.

El amuleto suele ser un colgante que se lleva en el cuerpo, pegado a la piel, aunque en ocasiones se cuelga en algún punto de la habitación (dormitorio), En algún otro punto de la casa o incluso se pueden llevar en el coche. La mayoría de los amuletos están grabados con símbolos mágicos o rituales.

La función de un amuleto es proporcionar una protección pasiva, como un escudo protector y repelente de influencias negativas y malignas provenientes del exterior. Así el amuleto debería reforzar la fuerza vital y curativa del cuerpo, propiciar el amor y la fuerza de atracción. El amuleto siempre está en funcionamiento, incluso después de que los hechos deseados hayan sucedido o, en caso de fuerzas negativas, hayan sido parados.

Subconsciente

Las imágenes y símbolos con los que están grabados son el lenguaje de nuestro subconsciente, identificándolos inconscientemente con una poderosa fuerza no perceptible por nuestro consciente. Son como un catalizador para abrir nuestra mente a esta fuerza y así hacerla aprovechable. Esta fuerza actúa tanto en el plano mental como en el espiritual.

De esta manera nuestro cuerpo va aceptando las órdenes de nuestros pensamientos trasladándolos a nuestra vida.

Los símbolos que llevan los amuletos están cargados de la energía espiritual de miles de personas a través de muchas generaciones, y también toman la energía del cosmos. Un amuleto puede ser fabricado específicamente para una persona o hecho (amuleto para ser utilizado en determinadas ceremonias, por ejemplo) y cargados de magia y consagrados.

Como anécdota de amuletos milenarios pondré el de algunos cristales que se utilizaban ( y se siguen utilizando) para los siguientes fines.

Amuletos

  • Aguamarina: protegía a los marineros de tempestades y tormentas.
  • Amatista: protegía a su portador de la embriaguez.
  • Piedra del Sol: atrae la buena suerte.
  • Moldavita: atrae la buena suerte y la aumenta la fertilidad.
  • Ojo de tigre: protege de las maldiciones y la mala voluntad de terceros.
  • Cuarzo Rosa: atrae el amor y fomenta las relaciones amistosas.
  • Ámbar: proporciona protección a las embarazadas.

Para terminar decir que amuletos existe a cientos, para elegir uno debemos de tener claro que es lo que queremos obtener de él, y así encontrar el más adecuado a nuestras necesidades.

Silvia Rossi

Amuletos y talismanes poderosos

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