Cuentan las leyendas que el maligno a menudo escoge a personas devotas de Dios para llevar a cabo sus posesiones. En este caso la elegida fue una joven adolescente con vocación de misionera, Clara Germana Cele. Precisamente hoy os contamos la posesión de Clara Germana Cole

Corría el año de 1906, y Clara era una joven estudiante cristiana de dieciséis años en la misión de San Miguel en Natal, Sudafrica. Aunque se desconocen el motivo, unos dicen que a través de rezos y oraciones y otros que como consecuencia de extraños rituales, cuentan que la joven acabó haciendo un pacto con  Satanás.

Pocos días después, Cele fue sufriendo una serie de impulsos extraños: rechazaba los artefactos religiosos como crucifijos, podía hablar y entender varios idiomas de la que no tenía conocimiento previo, y tenía conocimiento sobre los pensamientos y las historias de las personas que la rodeaban.

Las monjas que asistieron a Cele contaron que ella hacía horribles sonidos “bestiales”. También llegó a levitar hasta cinco metros en el aire, y más de ciento cincuenta personas afirmaban haber estado presente durante las levitaciones.

Finalmente, dos sacerdotes fueron llamados para realizar un exorcismo. Cele intentó estrangular a uno de los sacerdotes con la estola, mientras los sacerdotes realizaban el ritual y las levitaciones eran continuas, pero al final  los espíritus fueron expulsados del cuerpo de Clara.

supliquemos intensamente la misericordia de Dios

para que movido por la intercesión de todos los santos

atienda bondadosamente la invocación de su Iglesia

a favor de nuestro hermano(a) N.

que sufre gravemente.

(Del nuevo ritual del exorcismo romano)

Fran González

 

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