Clarividencia, más allá de los sentidos

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Clarividencia, más allá de los sentidos

Al igual que la mayoría de las creencias paranormales, los seres humanos, han demostrado una creencia en la clarividencia durante siglos.

La clarividencia, es la capacidad de experimentar la vida más allá de los cinco sentidos. Y por esa razón, a menudo se llama el ” sexto sentido”.

Esta información, se obtiene tocando objetos, personas, lugares o eventos físicos, a través de distintos medios. Es como una forma de percepción extrasensorial.

La existencia de las habilidades psíquicas, como la clarividencia, son muy controvertidas. Dentro de la parapsicología. La clarividencia se utiliza exclusivamente, para referirse a la transferencia de información oculta mediante el clarividente.

A diferencia de la telepatía, en que la información se obtiene directamente de una fuente física externa, en lugar de ser transferida desde la mente de un individuo a otro.

Se hizo especialmente famosa, a finales del siglo XIX y principios del XX. Durante el período espiritista, siendo uno de los aspectos más estudiados por los miembros de la ” Sociedad para la Investigación Psíquica SPR”.

Mientras que la investigación experimental en clarividencia, comenzó con estos investigadores, los estudios experimentales se hicieron más sistemáticos gracias a los esfuerzos de J.B. Rhine ( 1895- 1980, pionero de la parapsicología) y sus asociados en la Universidad de Duke.

La glándula pineal, tu tercer ojo

La “vemos” con lo que comúnmente se conoce como ” el tercer ojo”. En el cerebro humano, hay una glándula llamada glándula pineal. Se encuentra en la zona posterior del cerebro casi en el centro de la cabeza.

Esta glándula se ha degenerado de su tamaño original, comparable a una pelota de ping pong, a su actual tamaño comparable al de un guisante. Porque nos hemos olvidado, o nos han hecho olvidar cómo usarlo.

Se relaciona con las imágenes, que están presentes en nuestras mentes que llevan los mensajes de otra frecuencia y reinos. Estas imágenes pueden ser arquetipos, colores, imágenes fijas, en movimiento etc… Pueden ser cualquier cosa, pueden permanecer unos pocos segundos o por mucho más tiempo.

Inicialmente, la manera más fácil de verlos es con los ojos cerrados. A medida que se desarrollan las habilidades psíquicas se es capaz de mirar a una frecuencia más alta, con los ojos abiertos.

Óscar Ventura

María Orsic, la operación Aldebaran

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